Rise of the Argonauts

Rise-of-the-ArgonautsUna historia como la que cuenta Rise of the Argonauts merece algo más que lo que este juego tiene que ofrecernos.

Una historia con base en la mitología griega, que nos pone al control de Jasón, rey de Yolcos, y nos guía a través del amor y la venganza en busca de la resurrección de nuestra amada Alcmena.

Rise of the Argonauts es un juego fácil y cómodo de jugar, un juego que no ofrece mucho, pero tampoco pide demasiado por nuestra parte… y esa es la principal razón por la que el título queda en un segundo plano en esta nueva generación; y es que lo mencionado es cuanto tiene para nosotros.

Si buscamos un buen motor gráfico, bien explotado, que llene nuestros televisores con increíbles escenarios y fluidas animaciones no estamos en el sitio que deberíamos y si buscamos una mecánica de juego definida y pulida hasta el más mínimo detalle, este tampoco es nuestro juego.

Rise of the Argonauts decir que este juego es mediocre es un cumplido

Me da rabia decirlo; sé que detrás de un videojuego hay un buen puñado de personas trabajando día y noche durante años; quiero pensar que guiados por la ilusión de obtener un gran resultado final del que sentirse orgullosos; pero este Rise of the Argonauts queda muy lejos de poder competir en primera división…

Sufre numerosos problemas en todos sus campos; problemas que en ningún caso impiden que el juego pueda valer como entretenimiento, pero sí minan la experiencia de juego de una forma un tanto lastimosa haciendo que parezca que estamos probando un producto en fase de producción más que una versión final del videojuego.

Tenéis delante algo parecido a lo que saldría de la coctelera tras mezclar la aventura conversacional de Mass Effect con el universo y la acción de God of War; pero una vez más, falta algo más de maestría en la realización para alcanzar a cualquiera de los dos nombrados.