La historia del cine dejó en los noventa dos perlas del entretenimiento, Los Cazafantasmas y su secuela. Y de ello aún vive el genial Dan Aykroyd, el ‘blues brother’ bueno, que se incorporó con Harold Ramis al proyecto de guionizar una versión decente de Los Cazafantasmas en videojuego. El éxito suele llamar a la puerta de Aykroyd y la realidad es que Sony se ha esmerado en producir un juego de notable calidad, una aventura en tercera persona donde todo está cuidado al mínimo detalle, aunque la temática aburra por momentos de lo agotada que en realidad está.
Ya sabemos que el trabajo de los Ghostbusters es capturar espectros con una especie de lanzallamas y una trampa adecuada. Y, cual academia, junto a los protagonistas de la película iremos aprendiendo el oficio para capturar en equipo a los molestos fantasmas que aterrorizan (o a veces divierten) Nueva York. El entretenido tutorial, mientras la historia avanza, nos convierte pronto en expertos cazadores y buscadores con gafas especiales de los entes perseguidos. Cuesta un poco memorizar con el mando los comandos adecuados a cada situación, pero el nivel novato es perfecto para coger confianza.
Los Cazafantasmas el videojuego, es una aventura que todos podemos disfrutar, fans de las películas y los «otros».
El nuevo cadete en que nos convertimos debe ir superando niveles mientras va llenando la mochila de moquetes, fantasmas de la gula o el pescador, éste último en un nivel de excelente ambientación con una planta del Hotel Sedgewick inundada por completo. Esa es una de las claves del juego. Contra cierta reiteración de la dinámica del juego (localizar primero y atrapar después a un espectro, mejor en modo cooperativo que en solitario), la calidad de los efectos y de los gráficos son muy superiores a la jugabilidad, por momentos aburrida y algo lenta. Es decir, que los árboles no dejan ver el bosque. Y esto, aquí, es bueno.
- Genero: plataforma (tercera persona)
- Productora: Sony
- Multiplataforma
- Edad Recomendada +12
- Nota final: 7/10