En el mundo de los videojuegos muchos han marcado un antes y un después, sobre todo en la década de los 90 donde una generación creció con lo que se podría considerar la época dorada de los videojuegos. El 3 de septiembre de 1998 muchos jugadores tuvieron la suerte de vivir la experiencia de unos los más grandes videojuegos que jamás se hayan hecho y que se convirtió en uno de los grandes clásicos de la primera consola de SONY: Metal Gear Solid de Hideo Kojima.
Al habla Snake…
Tras seis años estando escondido en Alaska para vivir tranquilamente, Solid Snake es de nuevo reclutado por su viejo coronel para que se infiltre en la isla de Shadow Moses, la cuál ha sido tomada por miembros de FOXHOUND, su antigua unidad.
Es el único que puede hacer algo frente a la amenaza, sobre todo porque el líder de este cuerpo de élite es su viva imagen. Es más, hay algo personal en todo esto, ya que los terroristas amenazan lanzar un ataque nuclear con un nuevo prototipo de Metal Gear y además exigen que se les entregue los restos del cuerpo de Big Boss, el más grande soldado de todos los tiempos.
Totalmente solo y sin armas, Snake va a tener que adentrarse en una isla repleta de soldados para detener un posible ataque terrorista.
El sigilo, algo indispensable
El lanzamiento de Metal Gear Solid supuso la llegada de un juego en el que el sigilo era algo indispensable para infiltrarse sin problemas en la base de la isla.
Con la ayuda de un radar, el jugador podía ver cuál era el rango de visión de los soldados, así como por donde andaban. Gracias a esto, el jugador podía camuflarse y atacar desde las sombras, atrayendo a los soldados con ruidos, para que fuera más fácil el acabar con ellos.
Ahora, ¿si los soldados nos localizaban se acababa el juego? Para nada. Simplemente no paraban de llegar soldados y dispararnos con ametralladoras sin parar hasta que acabasen con nuestra vida o pudiéramos escondernos en un lugar al que no pudieran llegar.
Aunque al principio comenzamos sin armas, Snake no estaba indefenso ya que es un experto luchador y podía lanzar un combo de tres golpes o lanzar a los enemigos con una perfecta llave, así como agarrarlos desprevenidos para luego estrangularlos y acabar con su vida.
No todo es moverse entre las sombras
Claro que no todo era moverse entre las sombras, ya que aunque el jugador no lo quiera habrá momentos en los que los soldados venían sin parar para terminar con su vida o tenía que enfrentarse contra los miembros de FOXHOUND en combates de 1 VS 1 en diferentes circunstancias.
En estos casos había diversas estrategias que el jugador podía seguir para terminar con ellos, en base a las armas que se iban consiguiendo a lo largo del juego. Cada combate era único y dejaba momentos que quedaron guardados con gran aprecio en la memoria de los fans, como la forma única de ganar a Psyco-Mantis o el combate final contra Liquid sobre el Metal Gear Rex.
Snake no está solo en la isla…
Claro, si a uno le dicen que lo van a enviar a una isla repleta de soldados y que no va a llevar ningún arma puede pensar: ¿están locos?
Pero Snake no está completamente solo en la isla. Por un lado puede ponerse en contacto a través de vía Codec con varios personajes que forman parte del operativo para que le echen una mano, como con el Coronel o Master Miller que pueden dar muy buenos consejos sobre combate o Naomi sobre la situación de nuestro personaje.
No obstante, durante la evolución de la historia en la misma isla Snake encontrará compañeros que le ayudarán, dándole algún consejo sobre la base o ayudándole con la entrega de algunos objetos que le pueden ser de gran utilidad.
Dos posibles finales para la historia
Dado que durante la aventura Snake conocía a dos personajes, Otacon y Meryl, que le ayudarían en parte del juego, hay dos posibles finales para concluir la historia, todo en base a lo que se haga durante cierto punto del juego.
En ese momento se decide si cierto personaje muere o no, aunque con el tiempo Hideo Kojima confirmó que el personaje tenía que sobrevivir para el futuro de la historia que se contaba en las futuras entregas de la saga. Es más, según con que final acabásemos, en la próxima partida contábamos con un objeto especial que o bien podía ser el utilísimo camuflaje óptico que nos hacía invisibles a los ojos de los soldados o la bandolera que daba munición infinita cuando la teníamos equipada.
Un doblaje único para la época
Era bastante raro que un juego para Playstation llegase doblado, por lo que sorprendió mucho que esta entrega llegase íntegramente en español.
Con una calidad de doblaje insuperable, con Alfonso Valles en el papel de Solid Snake, muchos fans recuerdan con cariños muchas escenas del juego con este fantástico doblaje. A los fans les gustó mucho el resultado, lo que hizo que no parasen de pedir que futuras entregas fueran también dobladas.
No obstante, hasta la fecha, no ha habido ninguna otra entrega del juego que haya sido doblada al español, al considerarse que era algo innecesario y que ocupaba demasiado espacio en el disco como para perder el tiempo.
La experiencia continuaba con las misiones VR
Aunque la primera vez que uno jugaba a este juego podía tardar entre 10 – 15 horas en terminarlo, las siguientes veces resultaba mucho más fácil, pudiendo terminarse perfectamente en menos de 4 horas.
Es por ello que se optó por introducir algún elemento que hiciera que el jugador quisiera seguir jugando al juego, pero sin necesidad de tocar el modo historia. En el juego principal el jugador contaba con una serie de Misiones VR (Virtual Reallity) en el que tenía que alcanzar un objetivo eludiendo a los soldados, cámaras y demás enemigos.
No obstante, habían muy pocas misiones y es una época en la que la idea de los DLC estaba muy lejana, así que, ¿qué podía hacer Konami? Pues optó por lanzar un nuevo juego exclusivamente repleto de misiones VR para que el jugador pusiera a prueba sus habilidades en misiones con diferentes condiciones.
Un remake no tan apreciado
Aunque las ventas de Metal Gear Solid 2: Sons of liberty no fueron malas, los jugadores querían disfrutar de esta nueva experiencia pero integramente con Solid Snake en el primer videojuego.
Y así, en 2004, fue como llegó Metal Gear Solid: The twin snakes. Un remake que fue lanzado exclusivamente para la consola Gamecube y que llevó a la primera entrega de la saga al nuevo nivel.
El remake mantuvo intacto la esencia del juego original, solo introduciendo algunas nuevas frases en los diálogos con el objetivo de hacerlo más fiel a la versión japonesa y cambiando un poco algunas escenas para darle un poco más de espectacularidad a las habilidades de Snake.
Como novedades se introdujo la posibilidad de disparar en primera persona, como en la segunda entrega del título, y todas las características de este, mientras que se seguía manteniendo la magia de la primera entrega. No obstante, el juego no llegó doblado, lo que no gustó mucho a los fans españoles de la saga.
Su adaptación a novela, una forma diferente de vivir la aventura
Raymond Benson, escritor que ya había trabajado publicando novelas de James Bond, se ocupó de rectar la que sería la primera y única novela que hasta la fecha existe del juego.
En esta novela se revive la experiencia del juego, pero con un Snake un poco más sensible que el que Hideo Kojima nos presentó en el juego, en el que expresa más claramente sus pensamientos. A pesar de este pequeño cambio, y de algunos que el autor introdujo para hacer más ligera la lectura, la novela recibió críticas muy positivas por los fans.
¿Y la película de Metal Gear Solid?
La primera década del 2000 fue sin lugar a dudas la era dorada para que los estudios cinematográficos produjeran películas basadas en los videojuegos, y Metal Gear Solid no podía quedarse atrás.
En 2006 el propio Hideo Kojima confirmó que se lanzaría una película basada en su popular videojuego, pero hasta la fecha, es algo que ha quedado muy en el aire. Así, el proyecto ha ido pasando por varias manos, estando desde 2012 en manos de Arad Productions el llevar a imagen real al conocidísimo Solid Snake.
Entre los candidatos que podrían llevar al personaje a la gran pantalla han sonado muchos nombres, desde Christian Bale (dado la fama que consiguió con su papel en la más reciente trilogía de Batman) o Hugh Jackman, al que Hideo Kojima le encantaría ver en el papel.
En la actualidad solo existe una película de la saga, conocida como Metal Gear Solid: Philantropy la cuál fue realizada por fans y que recibió muy buenas críticas, incluso por el mismísimo Hideo Kojima que aseguraba que desearía ver una continuación de esa fantástica película.
Un título que hay que jugarlo al menos una vez en la vida
Metal Gear Solid es de esos títulos que por lo menos hay que jugar una vez en la vida, ya que se consigue una aventura donde el jugador conecta muy bien con los personaje y es como si viviera la aventura de primera mano.
A pesar de ser un juego con casi ya 20 años, muchos disfrutarían hoy en día de tener la oportunidad de jugar a este título y disfrutar de una de las mejores aventuras del fantástico Solid Snake.