Análisis: Dragon Quest Builders

Tras habernos despertado el apetito con su demo, Dragon Quest Builders finalmente ha llegado a las tiendas y ha llegado la hora de exprimirlo al máximo. ¿Qué? ¿No tienes claro si quieres comprarlo? Pues este análisis te hará tomar la decisión correcta.

Somos la única esperanza de la humanidad

Nada más empezar el juego tendremos que crearnos a nuestro personaje, decidiendo su sexo, su aspecto y su nombre. Tras esto, nos despertaremos en una cueva y una misteriosa voz nos explicará que somos el único futuro de Alefgrado, pues somos los únicos con la habilidad de construir.

Análisis: Dragon Quest Builders

Tras escapar de la mazmorra llegaremos a las antiguas ruinas de una pequeña ciudad, la cual tendremos que reconstruir para que poco a poco vayan llegando nuevos ciudadanos. Una historia bastante sencilla, pero que es suficiente para narrar la trama de este juego.

Empieza con lo básico, pero ve creciendo

Con Dragon Quest Builders el jugador se puede sentir como si estuviera avanzando a lo largo de la historia de la humanidad. Comenzaremos con objetos muy rudimentarios para poder construir otros nuevos objetos: madera, barro… pero según vayamos avanzando en la historia podremos ir empezando a utilizar roca, hierro o acero.

Claro que para trabajar todos estos elementos hay que ir consiguiendo nuevos objetos. Por ejemplo, nuestro personaje puede romper con puñetazos el barro, pero no puede hacerlo con la roca o el acero, por lo que habrá que construir una herramienta que nos permita romper estos materiales.

Análisis: Dragon Quest Builders

Aunque el juego deja bastante libertad de lo grandes o pequeñas que queramos hacer las estancias de la ciudad, hay algunas pautas a seguir para conseguir hacerla perfecta. Por ejemplo, una habitación sencilla solo necesita una cama de paja y una antorcha, pero si queremos una cocina está tendrá que tener una marmita, baúles para guardar los ingredientes y fuego para iluminarla bien.

Durante el transcurso de la historia vamos consiguiendo planos que nos permiten montar todas estas estancias, pero si somos lo bastante ingeniosos, podemos tener suerte y crear una por casualidad y así conseguir dicho plano. Para hacer los elementos necesarios para construir o armas necesitaremos lo que se denominan recetas, las cuáles las iremos consiguiendo según avanza la historia a manos de otos personajes o al derrotar monstruos.

Un personaje con unas necesidades básicas

Nuestro personaje, como tal, tendrá algunas necesidades que habrá que cubrir. Contará con una delimitada resistencia, que irá creciendo según aumenta su nivel.

Análisis: Dragon Quest Builders

Pero según va pasando el tiempo, cuánto más trabaje o a más enemigos se enfrente, su resistencia irá decayendo. Para rellenarla habrá que utilizar comida. Hay alimentos muy sencillos como las manzanas, pero se pueden preparar muchos platos en una cocina que aumentarán mucho más la resistencia.

No hay que olvidarse de la clásica barra de salud del personaje. Para recuperarse, se pueden crear varios ungüentos y pociones con las que restablecer la vida si sufre mucho daño.

¡Cuidado con los monstruos!

Si el objetivo del juego fuera simplemente construir una ciudad y gestionarla nos encontraríamos ante un Sim City creado por Square-Enix. Aunque es el argumento principal de la historia, también habrá que hacer frente a muchas clases de monstruos.

Todos ellos son los más clásicos del juego Dragon Quest, con los diseños de Akira Toriyama como es constumbre y están repartidos por toda la región. Al eliminarlos se irán consiguiendo objetos que se pueden utilizar para crear otros objetos como armas o materiales de construcción.

Análisis: Dragon Quest Builders

Por norma general los monstruos estarán lejos de la ciudad, pero en ocasiones la atacarán. Por eso hay que tenerla siempre bien preparada para que cuente con defensas fuertes que puedan contener los ataques enemigos mientras, con ayuda de aquellos ciudadanos dispuestos a pelear, nos vamos librando de ellos.

Claro queda el juego está más pensado para construir cosas que para jugar luchando, ya que el sistema de combate es muy primitivo. Tanto los monstruos como nuestro personaje hacen ataques muy simples y a veces cuesta bastante dar al enemigo o que él nos dé a nosotros. Algo que es una bendición y una cruz muy grande. ¡Ah! Y no hay que olvidar que este juego no es un JRPG. Nuestro personaje no aumentará su nivel por eliminar monstruos. No, lo hará al construir edificios y habitaciones. Cuánto mejor este esta construida, más experiencia obtendrá.

¿Vale la pena? ¡Claro qué si!

Aunque muchos apostaban lo contrario, con este título no nos encontramos ante una copia barata de Minecraft. No, el juego tiene una historia simple pero sólida, y es muy entretenido ir explorando todo el mundo de Dragon Quest Builders para ir consiguiendo los ingredientes y materiales necesarios para poder avanzar en la historia. Sin lugar a dudas vale mucho la pena.

Análisis: Dragon Quest Builders

Lo mejor: Una forma nueva y original de jugar a un Dragon Quest, con una aventura sencilla pero entretenida, acompañado de una fantástica banda sonora.
Lo peor: El sistema de combate es tosco y puede acabar siendo muy desesperante.

Puntuación: puntuacion