Ya es oficial, SONY ha presentado su nuevo modelo de Playstation 4 que en lugar de llamarse Neo pasará a ser conocida como PS4 Pro. Esta consola permitirá jugar a videojuegos en televisores 4k con dicha resolución, pero, ¿es algo innovador que realmente se necesita en casa o es uno de los mayores timos en la historia de las consolas?
Una consola que no aporta nada nuevo
Primero de todo, antes de hablar de la nueva consola hay que mirar un poco hacía al pasado. Cuando se habló del salto generacional, uno esperaba un gran cambio, como pasó de Playstation 2 de Playstation 3. No obstante, este «gran cambio» solo supuso que los juegos de PS4 tenían mejor sombreado y efectos de luz. No mejoraban la jugabilidad, no mejoraban la experiencia del jugador y, por supuesto, no aportaban nada nuevo.
Pues bien, SONY vuelve a repetir el mismo error de nuevo con su PS4 Pro. La consola, que permite una resolución de los juegos en 4k, lo único que aportará es que los juegos que se realicen con dicha resolución tengan un mejor efecto de sombreado y de luz. No mejorará casi en nada los juegos con respecto al modelo básico de la consola, y ya ni digamos de PS3. Estamos hablando de una consola que está pensada para TV que hoy en día cuestan entre 700 y 1200 euros los más económicos. Esto hace que uno se pregunte, ¿es necesaria?
¿Qué juegos van a salir en 4k que valgan la pena en PS4? Si uno mira el catálogo de la consola tristemente ve casi un 60% de juegos que se pueden comprar en PS3 mucho más baratos y remasterizaciones de baja calidad de juegos de PS2 y PS3. ¿Ahora van a relanzar todas esas remasterizaciones en 4k para venderlas de nuevo a 70€? ¿Vale entonces la pena comprársela?
Es una decisión personal, por supuesto. Pero SONY ha presentado una consola que no cambia nada de lo que hay ya en el mercado y que costará 399€, con fecha de salida para el 10 de noviembre de este mismo año. Si no se tiene todavía una PS4, ¿es mejor comprarse esta? Pues no, es mejor comprarse la PS4 slim que saldrá a la venta el 15 de septiembre por 299€.