God of war es una saga de videojuego que lleva acompañando a los jugones desde Playstation 2 y ha conseguido una gran cantidad de adeptos. Con un cambio radical para su nueva entrega, ¿por qué no repasar lo que ha sido la eterna lucha de Kratos contra los dioses y criaturas de la mitología griega?
Un pecado que jamás podrá borrar de su alma
De pequeño, Kratos era bastante grande y sufría bastantes abusos. Además perdió a su hermano pequeño. De muy joven lo entrenaron para convertirse en todo un guerrero.
Y así es como llegó a convertirse en un general del ejército de Esparta. A pesar de que se había casado y tenía una hija, su afán de poder no conocía límites, pues quería que todo el mundo sucumbiera al poder de Esparta. Comenzó así una encrucijada utilizando métodos brutales para ganar sus batallas y acabar con sus enemigos.
En una batalla contra un grupo de bárbaros, el ejército de Kratos fue aniquilado casi por completo, y este le pide ayuda a Ares, el dios de la guerra al que sirve, entregándole su vida a cambio del poder para acabar con sus enemigos. Este le hace entrega de las Espadas del caos, las cuáles son unidas a sus brazos por unas cadenas.
Así Kratos se convierte en un temible guerrero que comienza a acabar fácilmente con sus enemigos. Un día quería ingresar al templo de la aldea, pero el oráculo le advierte que no debe hacerlo. En su interior acaba con la vida de todos los presentes, siendo estos últimos su mujer y su hija. La oráculo le dice que jamás podrá borrar ese pecado, ya que las cenizas de ellas dos estarán por siempre adheridas a su cuerpo.
El espartano abandona así el mando de Ares, buscando una forma de poder eliminar su pecado y las pesadillas que no dejan de atormentarle.
Sirviendo a los dioses para olvidar sus pesadillas
La primera entrega de God of war que se lanzó el 22 de marzo de 2005, nos presenta a un Kratos que ha sido enviado a acabar con la Hidra, el monstruo mitológico que podía regenerar sus cabezas sin importar cuántas veces se la cortasen y que ha dejado de servir a Poseidón.
Una vez que ha terminado su trabajo, Atenea le informa que tiene una última misión para el guerrero espartano y a cambio los dioses pondrán fin a sus pesadillas. Su última misión es salvar a Atenas del ataque de Ares, el Dios de la guerra, quien ha descendido desde el Monte Olimpo para destruirla.
Sin embargo, Kratos no es más que un ser mortal y nada puede hacer contra el Dios, por lo que su única posibilidad es buscar la famosa caja de Pandora y liberar todo su poder para lograr hacer algo contra el temible Dios.
Una nueva forma vivir los juegos de acción
God of war es un videojuego que combina la acción con los puzzles. Durante la mayor parte del tiempo estaremos luchando contra enemigos usando nuestras Espadas del caos realizando diversos combos. Al principio los movimientos son muy sencillos, pero según Kratos va consiguiendo almas se pueden conseguir nuevos combos. No solo cuenta con combos, sino además con ataques mágicos que le son otorgados por los mismísimos dioses y que serán muy útiles en la batalla.
Su vida y su magia pueden aumentarse al conseguir determinados objetos; cinco ojos de górgona para la magia y cinco plumas de Fénix para la magia. Además cuenta con la posibilidad de agarras a sus enemigos para asestarles fuertes golpes.
Para acabar con los enemigos, sobre todo con los jefes, se requiere pulsar una determinada secuencia de botones que da a lugar a impresionantes ataques. En el caso de los grandes jefes finales es la única forma de conseguirlo, mientras que con los jefes más pequeños, pulsar esos botones permite conseguir que los enemigos suelten almas de vida y de magia, según el monstruo.
Aunque el juego es casi todo el rato de ir matando, también cuenta con una gran cantidad de puzzles que el jugador tendrá que resolver. Hay muchos laberintos por los que dar vueltas una y otra vez para rebanarse los sesos y acabar consiguiendo resolver el puzzle.
Su éxito trajo consigo la segunda parte
God of war fue un éxito en ventas, por lo que muy pronto se pusieron manos a la obra para lanzar su secuela, God of War II.
Kratos ahora es el nuevo Dios de la guerra tras haber obtenido los poderes de la caja de Pandora y haber matado a Ares. Sin embargo, su sed de sangre le ha hecho llevar al ejército de Esparta a una guerra sin cuartel. Decide destruir la ciudad de Atenea personalmente, por lo que desciende a ayudar a los suyos.
Sin embargo es engañado por Zeus, quien utilizando la espada del Olimpo le roba todos sus poderes divinos y lo convierte en un mortal al cuál mata con sus propias manos. Pero Kratos es rescatado por Gaia, quien le promete ayudarle si a cambio ayuda a los titanes a hacerse cargo de Zeus. Kratos no se lo piensa dos veces.
Así comienza una nueva aventura por toda Grecia en la que Kratos tendrá no solo que hacerse más fuerte, sino además ganarse el favor de varios de los titanes.
Una entrega no tan diferente de la anterior
Saliendo con tan solo dos años tras la anterior entrega, en realidad nos encontramos ante el mismo juego solo que cuenta con algún que otro elemento nuevo.
Los ataques mágicos han cambiando, así como algunos combos (pero la mayoría son idénticos). En esta nueva entrega Kratos hace frente a enemigos mucho más grandes y hay escenas en las que hay que pulsar una secuencia de botones para poder avanzar o se morirá.
Además también cuenta con secuencias en las que habrá que volar sobre un Pegaso negro envuelto en llamas, superando ataques aéreos enemigos. Fue toda una nueva experiencia para vivir el juego. Sin embargo, su final abierto dejaba claro que habría una tercera parte.
Regresando un poco al pasado con su nueva entrega
El siguiente videojuego, Chains of Olympus, sin embargo no fue una continuación y salió en exclusiva para PSP (aunque posteriormente se remasterizaria para PS3).
Esta entrega sucede antes del primer videojuego de God of War, y son los diferentes trabajos que el espartano hizo para los dioses. El Sol ha desaparecido porque alguien ha secuestrado a Helios y la noche se está expandiendo por todo el mundo. Además, Atlas, el titán que sostiene el mundo sobre sus hombros, ha escapado.
La culpable de todo es Perséfone, la esposa de Hades, quien está utilizando al dios del sueño para sus propios fines. Kratos no solo tendrá que buscar la forma de salvar a Helios, sino también que pondrá a prueba su fuerza contra un Titán y contra la esposa del dios de los muertos.
Una entrega que tuvo bastante buena acogida entre los fans, aunque las limitaciones de la PSP hicieron que no luciera tan espectacular como las otras dos entregas de la saga.
Y al fin la tercera parte
En 2010 llegó la tercera entrega tan esperada de la saga para la consola Playstation 3, prometiendo ser mucho más espectacular que anteriores entregas.
Kratos, enterado de que es hijo de Zeus y quien va a provocar la destrucción de todo el Olimpo, esta ascendiendo a este acompañado por todos los titanes a los que ha liberado.
Sin embargo, tras acabar con Poseidón es traicionado por Gaia y de nuevo es enviado al inframundo. Pero una vez allí es ayudado por Atenea, quien se supone que había muerto a manos de Zeus. Sin confiar mucho en ella, Kratos decide comenzar un nuevo viaje para poder hacerse con el poder suficiente para poder destruir a Zeus.
Según Atenea, tiene que abrir de nuevo la caja de Pandora, pero para ello necesitará una llave en especial para conseguirlo.
Es el momento de destruirlo todo
Si las anteriores entregas ya eran un poco salvajes y Kratos tenía que acabar con todo, en este juego eso se llevó al límite.
Continuaba combinando la acción con resolver puzzles, pero en esta ocasión los enemigos principales eran los dioses del Olimpo y los titanes, por lo que los combates son mucho más espectaculares. Cada asesinato conlleva una pequeña destrucción de una parte del mundo, lo que lo acabará convirtiendo todo en un caos.
Sin embargo a Kratos solo le importa su venganza para terminar con la vida de Zeus y así poder dejarlo todo atrás. Su final de nuevo fue abierto, por lo que no se sabe que fue lo que sucedió con el Dios de la guerra.
Y de nuevo, otro juego anterior para la consola portátil
El mismo año que llegó God of War III a las tiendas, poco tiempo después fue lanzado God of War: Ghost of Sparta para la consola PSP de SONY.
Su historia se situaba entre God of War II y God of War III. En esta nueva entrega, Kratos como nuevo Dios de la guerra no para de tener recuerdos de su vida como mortal, cuando entrenaba junto a su hermano Deimos. Este fue raptado por Zeus y Ares porque la visión de un oráculo había predicho que sería el causante de la destrucción del Olimpo y que encabezaría una revuelta comandando a los titanes.
Kratos decide investigar más sobre su hermano, para saber que pasó con él. Así es como descubre que durante todos los años que han pasado su hermano ha sido torturado por Thanatos, del mismo modo que acaba descubriendo la identidad de su verdadero padre, al que nunca conoció, que no es otro que el mismísimo Zeus.
El juego de nuevo estuvo muy limitado por la potencia de la consola, pero a los fans les agradó mucho conocer más sobre la historia del espartano.
Una nueva entrega que fue el comienzo de todo
Dado que todavía no había nada dicho sobre que se iba a hacer con God of war IV, ni si iba a haber una continuación, se realizó un nuevo juego, títulado God of war: Ascensión.
Esta nueva entrega es la primera de todas cronológicamente hablando. Tras haber renunciado a servir a Ares, Kratos se encuentra en una prisión torturado por las tres furias, las cuáles le obligan a revivir una y otra vez el asesinato de su familia y lo maltratan físicamente.
Por accidente, Kratos logra escaparse de las cadenas que lo aprisionaban y comienza su camino para salir de la prisión. Durante su andaduria es ayudado por Orkos, el hijo de las tres furias, quien le va informando de cuáles son los planes de sus madres para con él.
Tras su liberación, Kratos se convierte en el siervo de los Dioses del Olimpo con el objetivo de que las pesadillas que tienen por sus pecados lleguen a su fin.
Poco tiempo después, se sumó a las remasterizaciones
God of war fue una de las primeras sagas que se lanzaron a las remasterizaciones. Con el anuncio de God of war III se anunció una edición coleccionista que simulaba la caja de Pandora en la que se incluirían todos los juegos de la saga.
Sin embargo, poco tiempo después se lanzaron dos packs recopilatorios. El primero incluyó God of war I y II y el segundo Chains of olympos y Ghost of Sparta. Las cuatro entregas de la sombra de Esparta se remasterizaron a la alta definición, pero sin incluir nada nuevo.
Con el lanzamiento de Playstation 4 se anunció una remasterización de God of war III, la cuál tampoco cuenta con muchas mejoras significativas con respecto a la entrega que salió en la anterior consola.
Kratos también aparece en otros juegos
Los fans de God of war han tenido la oportunidad de ver al espartano en otras sagas de videojuegos, como en Little Big Planet como un skin o Modnation Racers.
En los juegos de lucha ha tenido mucha más relevancia. En Playstations All-Star Battle, videojuego de lucha con personajes de SONY al más puro estilo de Super Smash Bros, es un personaje jugable. También es personaje jugable en el videojuego de Mortal Kombat IX para Playstation 3, contando con la mayoría de sus combos en su versión de God of War III.
Para Soul Calibur: Broken Destiny, para PSP el personaje de Kratos fue el personaje invitado, pudiendo usar sus Espadas del caos para hacer frente a los diferentes personajes del juego.
Una película de la que nunca se supo nada
Poco tiempo después del lanzamiento de God of War II se anunció que se estaba trabajando en una película inspirada en el Espartano y que esta acabaría llegando. No fue así.
Por un lado estaba el gran problema para encontrar un director y a los actores, y por otro lado el gran cabreo de los fans por cada nueva noticia que salía sobre la película. Lo que fue más sonoro fue elegir a un actor negro para interpretar a Kratos, cosa que no gustó mucho ya que Kratos tenía un tono de piel oscuro cuando no llevaba las cenizas, pero no por ser descendiente de raza negra sino por el continuo contacto con el sol.
Al final el proyecto se acabó cancelando, aunque de vez en cuando se oyen nuevos rumores de que se sacará adelante.
Su historia también en novela
Las aventuras del espartano han sido llevadas a novela en dos ocasiones. La primera de ellas salió en 2010, de la mano de Mattew Stover y Robert E. Vardeman.
Dicha novela narra las aventuras que Kratos vive en el primer videojuego de God of War, pero añadiendo algunos cambios que no se cuentan en el juego, como las conversaciones que Atenea mantiene con el resto de dioses del Olimpo para que ayuden a Kratos, recuerdos del espartano en aventuras anteriores o un cambio en el final del juego.
En el juego Kratos se iba a suicidar para acabar con su vida y así olvidarse de las pesadillas. Sin embargo, su objetivo era ir al Hades para beber las aguas del río Leteo y que esto le ayudase a perder todos sus recuerdos.
Su segunda novela, que esta vez fue escrita en solitario por Robert E. Vardeman, está basada en el segundo videojuego de la franquicia. De nuevo se añadieron varios nuevos elementos que aportan mucha información sobre la historia del espartano que pueden resultar la mar de interesantes para el fanático de la saga.
Un cambio radical para su nueva entrega
En el pasado E3 se presentó un tráiler del que sería el nuevo God of war. De momento sin ningún sobrenombre más, el juego será exclusivo para la consola Playstation 4 de SONY y se tiene pensado su lanzamiento para 2017.
En el tráiler se puede ver a un Kratos más viejo que está viviendo tranquilamente con su hijo, sin saber quien es la madre de ese niño, y se enfrentan a diferentes criaturas. Las espadas con cadena de Kratos han sido sustituidas por un hacha y la dinámica del juego ha cambiado un poco, pues ahora Kratos no se mueve tan rápidamente como antes.
La historia ocurrirá en Asgard y estará inspirada en la mitología nórdica. Todavía no se ha dicho nada de que vaya a ser un juego que continúe la historia del espartano, pudiendo ser un lavado de cara total para las nuevas generaciones que todavía no conocen las aventuras de Kratos.