Haciendo mates en la infancia con Slam Dunk

Hoy se pone a la venta el primer volumen de la serie Slam Dunk a manos de la distribuidora Selecta Visión, de modo que, ¿por qué no hacer un repaso por lo que ha sido esta serie durante 26 años?

El baloncesto, un deporte por el que darlo todo

Hanamichi Sakuragi solo tiene 15 años y ya ha sido rechazado por 50 chicas. Puede que sea por su pelo pelirrojo, puede que sea por su gran altura o puede que sea por las pintas de macarra que tiene. La cuestión es que la última chica le ha rechazado lo ha hecho porque le gusta un chico que juega al baloncesto, lo que hace que le coja mucha tirria al basket.

Haciendo mates en la infancia con Slam Dunk

Pero poco tiempo después conoce a Haruko Akagi, quien cree que el joven tiene potencial. No puede negarse a hacerle una muestra de sus habilidades a una chica tan guapa y simpática, así que intenta hacer un mate. Para su desgracia acabe estampándose contra el marco de la canasta. Aún así, la chica cree que su capacidad de salto sería fantástica para el equipo del Instituto.

Tras enfrentarse en un duelo individual contra el hermano de Haruko, Takenori Akagi, Hanamichi entra en el equipo de baloncesto del Shohoku, creyéndose él mismo como una estrella que ha nacido para eso por las palabras de la chica. Pero no sabe lo que le espera.

Poco a poco comprendiendo el baloncesto

Aunque Hanamichi tiene una gran capacidad de salto, poco o nada entiende de este deporte. No sabe que hay que botar la pelota al moverse, lo que se considera una falta o ni mucho menos dejar de lado sus sentimientos personales fuera de la cancha.

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Pero según va avanzando la serie, va aprendiendo poco a poco, aunque haya una temporada en que no hagan más que expulsarlo por cometer faltas. Según va avanzando la serie, comprende lo importante que es para Akagi el llegar al campeonato nacional y ganarlo, así como para el resto de sus compañeros que viven el baloncesto como si formase parte de ellos.

Hanamichi acaba sintiendo tanto el deporte, que tras perder un partido importante decide raparse la cabeza porque cree que el haber perdido el combate fue cosa suya.

Los 5 principales, el resto no importan

Al principio de la serie, antes de que se forme el «equipo estrella del Shohoku», en partidos amistosos y en los entrenamientos vemos como hay otros jugadores del equipo que participan en los entrenamientos y los partidos.

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Sin embargo, poco a poco estos van quedándose un poco al margen, pasando de ser jugadores a meros animadores de sus compañeros. Uno de los recurrentes que suele jugar es Kiminobu Kogure, pero su habilidad en el campo no se puede comparar con la de los cinco jugadores estrella del equipo, por lo que solo suele salir a hacer una leve sustitución y para algún que otro momento donde uno de esos jugadores no puede continuar.

Poco se tarda en la historia el olvidarse de estos jugadores y poner todo el peso de la historia en Hanamichi y los otros cuatro jugadores.

Una historia de constante superación

Aunque los cinco jugadores estrella del Shohoku son de lo mejor que se haya visto nunca en el equipo de baloncesto del Instituto, hay otros jugadores de otras escuelas que están a su mismo nivel o incluso que los superan.

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Durante todo el torneo regional, los jugadores del equipo tienen que dar lo máximo de si mismos para superar estos obstáculos y así poder llegar al torneo nacional. No solo su cuerpo soporta la enorme presión física de los partidos, sino también su mente al tener tanta presión sobre sus hombres.

También hay un hueco para la comedia

Está claro que Slam Dunk es una serie que trata el deporte del baloncesto con algo más seriedad que lo hace la serie Dash! Kappei (Chicho Terremoto), pero ello no quita que no haya momentos para echarse unas risas.

El mal humor de Hanamichi provoca en muchas ocasiones momentos muy cómicos, por no hablar de su propensión a ponerle motes a sus compañeros, como a Rukawa que lo llama zorro o a su capitán al que lo compara con un gorila y siempre alude a su todopoeroso «mate del gorila» cuando están jugando un partido.

Haciendo mates en la infancia con Slam Dunk

Pero no solo es a sus compañeros con los que provoca momentos divertidos, sino también con sus rivales, por los que en realidad no tiene ningún respeto, ni tampoco por su entrenador. Dado que Haruko le dice que es un genio, en todo momento se lo cree y por eso no cree que nadie sea mejor que él a pesar de que se lo hayan demostrado en varias ocasiones.

Referencias al mundo profesional de baloncesto

En algunas ocasiones, el manga de Slam Dunk hace referencia al mundo profesional del baloncesto, sobre todo a jugadores famosos de la NBA.

Haciendo mates en la infancia con Slam Dunk

Por ejemplo, el personaje de Rukawa está inspirado en el famoso jugador Michael Jordan. Rukawa es considerado el mejor jugador juvenil de Japón, y su gran sueño es poder jugar en la NBA. Pero su estilo de juego es muy parecido al del famoso jugador, con su afán de enfrentarse uno contra uno con los rivales más fuertes. Por otro lado, otros jugadores de la serie están inspirados en famosos baloncentistas, como Hanamichi que está basado en Dennis Rodman o Akagi en Partick Ewing.

También hay mención cuando Sakuragi debe tirar unas faltas bajo el aro, cosa que se le da muy mal, y utiliza el mismo sistema de tiro que usaba el jugador Rick Barry de flexionar las rodillas y lanzar la bola hacía arriba. Curiosamente, aunque los jugadores reconocen el estilo de tiro, no se sabe de donde lo ha sacado Hanamichi para utilizarlo.

El anime dejó un final muy abierto

Slam Dunk es uno de esos ejemplos de animes que no llegan a abarcar todo el manga. La serie dejó un final muy abierto y hasta la fecha no se ha continuado.

Es de las adaptaciones más fieles que existen, salvo algunas excepciones donde incluyen algunas partes de relleno poco significativas. No es hasta los últimos episodios de la serie donde se utilizó el relleno para darle un final.

Haciendo mates en la infancia con Slam Dunk

En estos últimos episodios, mientras que Akagi y los demás se van a un viaje para estudiar un poco a los rivales, Hanamichi se ve obligado a quedarse en el instituto para practicar sus tiros bajo la canasta, en la que debe encestar 20.000 tiros libres. El partido final que se juega en la serie, que no aparece en el manga, es una prueba a superar por el equipo estrella del Shohoku, que deben vencer a un equipo compuesto por los 5 mejores jugadores de la prefectura. Si no les ganan, no podrían pasar al torneo nacional.

Finalizado el anime, se fueron lanzando una serie de OVA´s en los que los diferentes partidos que juega el equipo cuenta con algún jugador que tiene alguna relación, de alguna manera, con alguien del equipo Shohoku, por lo que juegan en ocasiones los sentimientos personales en dicho partido.

Tras las OVA´s, la serie se dejó tranquila y nunca más fue adaptada al anime para adaptar la parte del campeonato nacional.

Protagonizando videojuegos de baloncesto entretenidos

Slam Dunk ha tenido la suerte de protagonizar en varias ocasiones muchos videojuegos que han hecho pasar a sus fans, y a los no conocedores de la serie, momentos muy divertidos.

Su primera aparición en el mundo de los videojuegos fue para la consola GameBoy de Nintendo, con un videojuego la mar de sencillo, con un control bastante tosco, en la que a los personajes solo se les veía por su rostro en la pantalla, ya que por el campo solo se movían los números de los jugadores. Pero cuando se tiraba o se intentaba robar el balón, salía una escena del jugador realizando tal acción, así como muchos que aparecen en el anime. Este juego contó con una segunda entrega, esta vez a color con la llegada de la nueva GameBoy Color (aunque su lanzamiento oficial fue para la posterior), pero estuvo mucho más limitado que su primer juego. De nuevo los jugadores en el campo eran representados por números y al realizar una acción, en esta ocasión, salía el jugador en versión super deformed realizándola con unas animación bastante repetitivas.

Haciendo mates en la infancia con Slam Dunk

La gran oportunidad para la serie llegó con la consola Super Nintendo, para la cuál lanzaron Slam Dunk: Shikyou Gekitotsu!!. En dicho título, por fin se podía ver al cancha al completo con los personajes en una versión SD, que no se les podía controlar directamente. Pero al pulsar un botón, saltaba una animación del jugador corriendo. Cuando un jugador rival le cortaba, teníamos que decidir por donde realizaríamos el «driblaje», pero si es al contrario, teníamos que cortar al jugador para robarle el balón. Del mismo modo, cuando se iba a tirar, si era por dobles o triples, el jugador rival saltaba delante nuestra, dificultándonos la visión, y teníamos que encontrar el mejor momento para tirar. En los tiros de mato o «en bandeja», teníamos que lograr correr más que el jugador rival para que no nos cortase el tiro. Y si éramos nosotros los que defendíamos, había que hacerlo a la inversa. Este juego solo narra la primera parte del anime.

El juego gustó mucho y dado que había que cubrir la segunda parte del anime se lanzó una segunda parte que cubría hasta el partido clasificatorio para el torneo nacional. La consola SNES volvió a contar con un juego de Slam Dunk con personajes deformes, pero con la diferencia de que en esta ocasión si que los podíamos controlar libremente. Además, según se iban haciendo buenas jugadas se iba rellenando una barra de energía. Al completarse, nos permitía realizar un tiro especial con los jugadores (el mate gorila de Akagi por ejemplo). Del mismo modo, los rivales contaban con su propia barra que les permitía hacer un tiro especial. Un juego sencillo, pero que se podría catalogar como uno de los mejores juegos basados en la serie.

La consola Mega Drive de SEGA fue la primera en lanzar un videojuego para consolas de sobremesaa de la serie en la que los personajes no eran deformes. En este juego, la cámara se situaba por detrás del jugador que llevaba el balón y debía avanzar hacía el campo contrario. Su control era bastante sencillo, aunque algo tosco. Se repitió el mismo mecanismo para su videojuego para la consola Sega Saturn, pero con gráficos mucho más mejorados y nítidos. Dicho juego contó, además, con escenas del anime.

Haciendo mates en la infancia con Slam Dunk

La serie también tuvo su pequeño momento de gloria en las consolas arcades con Slam Dunk: Super Slams, realizado por Banpresto. Este juego solo permitía elegir entre cuatro equipos y se basaba en los juegos de baloncesto de toda la vida: personajes de altura normales, en un campo que se veía desde una vista que permite controlar la cancha a la perfección y el movimiento de los jugadores. Un juego con una dificultad interesante y perfecta para todos los que buscaban un buen reto.

Desde el videojuego de Saturn, la serie no ha contado con ninguna nueva adaptación al mundo de los videojuegos como le ha pasado a otras series clásicas del deporte como Captain Tsubasa que tuvo nuevas entregas para DS o Playstation 2 o una de las grandes rivales de la época, y más antigua, Dear Boys. En el videojuego Jump Ultimate Stars para la consola Nintendo DS en la que se reunieron los personajes más emblemáticos de la Shonen Jump. En dicho videojuego, varios de los personajes de la serie pueden usarse como personajes de apoyo y cuenta, además, con un escenario propio. Por desgracia, para el videojuego J-Stars Victory se decidió usar a un personaje de la serie Kuroko no basket por ser mucho más moderna.

Su paso por España nunca ha sido olvidado

Mientras que muchos pueden recordar fácilmente como la serie de Slam Dunk se emitió en varias ocasiones en las cadenas catalanas, ¿cuántos pueden recordar su paso por las cadenas de habla castellana? Bastantes pocos, seguro, y es que la serie, al contrario de otras como Captain Tsubasa (Oliver y Benji) o Dash! Kappei (Chicho Terremoto), pasó muy desapercibida.

Haciendo mates en la infancia con Slam Dunk

Aún así, el anime cosechó bastante éxito entre los fans de la serie. Además, en 2003 la editorial Ivrea se ocupó de distribuir la edición manga de la serie, mientras que el anime solo se emitía en televisión porque la propietaria de sus derechos, Selecta Visión, no veía rentable lanzarla a la venta en formato VHS. Ivrea editó por completo la edición takobon del manga, y en 2010 comenzó a editar la edición Kazenban, la cuál se compone de 24 tomos y en mayo de este mismo año lanzó finalmente el último tomo.

A pesar de que la serie se emitió completa, nunca llegaron las OVA´s. Sin embargo, ahora Selecta Visión lanza la serie en DVD y BD, al parecer lanzando un volumen de manera bimestral puesto que para septiembre no hay ninguno programado, y puede que se encarguen de traer las inéditas OVA´s que nunca llegaron a España. Aunque es algo complicado, ya que ellos mismos, así como las editoriales de manga, han hecho hincapié a que las series shoen de género spokon no venden tan bien como los shonen de acción, y esta serie, junto con la reciente Hayakyuuu! podría ser una prueba para ver que tal está el mercado tras el gran fracasó que tuvo Captain Tsubasa.